De quejas, llantos y lamentos…
Por: Salvador Castro Iglesias
Correo electrónico: salcasis@yahoo.com.mx
Ay mamá, ahí vienen las próximas elecciones, pensé para mis adentros al ver que el año nuevo ya no lo es, estamos casi a fin del mes de enero y al parecer (todo parece indicarlo el calendario) pronto estaremos inmersos en esa supuesta fiesta que es la Democracia. Todos nos preparamos para hacerle frente y alistarnos para salir victoriosos (dependiendo del Partido en el que cada quien milite).
A lo largo de mi vida he transitado por varias elecciones Locales y Federales, y eh visto y escuchado toneladas de propuestas, buenas intenciones, caras de candidatos sonrientes y muy seguros de su triunfo en dichas contiendas.
Pero algo está pasando en este hermoso País, cada elección(es), los seres humanos que vivimos en México, de repente nos transformamos en otra cosa, más aún con las famosas redes sociales, que como por arte de magia con convierten en depredadores de nuestro entorno de su gente.
En cuanto comienzan las campañas(o antes de ser posible), los candidatos ungidos por los respectivos y aprobados (muchas veces por abajo del agua), se destapan, convocan, esgrimen sus razones para ser los buenos, halagan a sus vasallos y los invitan a ganar a como sea lugar, sin importar si se tiene o no el arrastre con la gente, mil trucos salen a las luz, engordamiento de ánforas, muertos de milagrosamente reviven para ir muy seriecitos a botar, y en fin amigos, tantas trampas y recursos oscuros para garantizar que el nuevo Tlatoani de este mi México querido gane a toda costa la Presidencia de la República, La Gobernatura del Estado en cuestión, Las Alcaldías y demás puestos menores como son los Diputados y Senadores más Regidores de la Ayuntamiento.
En cuestión de días, los candidatos ya se encuentran como peces en el agua, con recursos suficientes para que marche bien, con sus colaboradores prestos a salir a la lucha Democrática y muchas más linduras.
Lo triste y todo aquello que resulta de estas o esas u otras elecciones es que el País pareciera que va de mal en peor, alzas en los costos de las gasolinas, el gas que sube y sube, la canasta ya casi deja de ser llamada canasta (creo que recipiente estaría mucho mejor), más impuestos, multas y recargos, mucha más burocracia, indolencia por parte de muchas autoridades para proteger a la población de tanto condenado malandro que habita en nuestras ciudades, impunidad al grado de cinismo de muchos ex funcionarios Públicos que le entraron con ganas al presupuesto para su beneficio, hasta quedar esa sensación deprimente que no termina de acomodarse en nuestros cuerpecitos.
Pero mientras tanto, los y las candidatos(as), festejan sus victorias durante los procesos de elecciones, prometen y prometen y vuelven a prometer, y el pueblo con la cara larga como la cuaresma, tratando de comprender que en esta elección, también volverá a meter la pata pensando que si no vota por fulano y por el otro si las cosas mejorarán.
Lo interesante del asunto es que al parecer todos son los buenos, y cuando reviso las caras de algunos de ellos, resulta que este era rojo, después fue amarillo y ahora se puso Moreno, ay que caray ¿y los ideales? ¿y los principios?, a mí no me la pegan, todo parece indicar que volverá a girar la ruleta de los dineros en las campañas y a darle vuelo a la hilacha ¿a poco no?
Que si no van de la mano las filosofías de un Partido, no pasa nada, hacemos que esta encaje, la parchamos, la enrollamos pero de que se ajusta se ajusta.
Y vemos como en cada elección se repiten los nombres, las caras de muchos políticos que aún no entienden que ya su tiempo pasó y que tal vez pronto deban de ponerse a trabajar, creo sinceramente que el País ya casi no da para más.
Pareciera que a muchos Ciudadanos de este País no les interesa en lo más mínimo sacar adelante a México, con propuestas serias y no con chacotas, con un gran compromiso hacia su tierra, sin trampas, maromas ni fugas, cada día la situación de nuestra gente va en caída libre, muchos de los recursos fueron desviados para programas sin sentido y usados para su propio beneficio y eso la verdad no se vale.
Yo invito los habitantes de este bello Estado (BCS), a que decidamos bien por quien votaremos, por personas de bien, por Ciudadanos ejemplares que busquen crear riqueza y no quedarse con la riqueza encomendada a ellos.
Por lo pronto esperaré a que terminen las elecciones esperando que yo al menos haya tomado una buena desición para esta elección.
Nos leemos mas adelante…