MIS RECUERDOS
EL MURO EN LÍNEA
Por: Salvador Castro Iglesias
Correo electrónico: salcasis@yahoo.com.mx
Mis recuerdos son tantos que a veces ya no los recuerdo, Tengo tantos acumulados que enumerarlos sería en gran problema para mí.
Sin embargo tengo algunos que me gustan, el recuerdo de los brazos de mi madre, el primer beso que recibí de esa chica allá en mis años mozos, las mujeres que me acompañaron durante un trecho de mi camino y que me dieron el lujo de ser padre, si, 1 hijo varón y 3 chicas que hoy veo transitar por su vida felices, plenas(o), realizadas(o) y que curiosamente me recuerdan cuando uo caminé esa etapa de mi vida.
Hoy deseché muchos recuerdos, reconocimientos que me dieron cuando yo necesitaba de eso, papeles, muchos papeles que se fueron a la basura para hacer espacio a otros más recientes, fotos que guardaba de mis ayeres y que hoy prefiero conservar en mi memoria. Tantas cosas que ya no ocupo porque tengo muchos recuerdos.
He decidido archivar mis recuerdos en mi mente, ahí siempre hay espacio para ellos, no estorban, no guardan polvo y jamás se harán viejos por el paso del tiempo, eso es genial, siempre podré traerlos de vuelta, tocarlos, hojearlos y volver a vivirlos.
Recordar a mis amigos, unos que ya no están, otros que por ahí deben andar y pocos, muy pocos que han decidido seguir a mi lado me hace reflexionar sobre lo que uno necesita en realidad; un buen amor para vivirlo día a día, pocos amigos para poder compartir con ellos sin olvidar a ninguno y con los cuales siempre podré beber un buen whisky o un buen vino cualquier día, sin que sea necesario que haya una festividad y mi trabajo que amo y me da para seguir en este camino y poder juntar suficientes recuerdos algún día.
Hoy recuerdo cuanto he aprendido sobre la lealtad, de esa que cada día pareciera que va desapareciendo, en donde cosas muy básicas como la palabra y el honor no son moneda de cambio y las promesas de amistad y compañerismo muchas veces se van al olvido.
Aprendo, todos los días, siempre aprendo, porque hacerlo me permitirá algún día tener recuerdos de quién me enseñó o de quién aprendí.
También recuerdo que la vida es una escuela de primer nivel, todo te aprueba o te reprueba, dependerá de tus actos, ellos son quienes calificarán mi vida al final de mi camino.
Si, recuerdo, los mayores tropiezos y mis aciertos, con ellos de la mano aprendí que nada es fácil en esta vida, que todo tiene un precio y que pagarlo vale la pena.
Mis antepasados son de mis mejores recuerdos ¿saben?, ya no están conmigo pero su recuerdo de lucha, de honestidad, de valentía ante la vida y la muerte me hacen recordar de adonde vengo, quién soy y hacia donde iré, gente de bien, que juntó sus recuerdos, me los transmitieron y hoy los tengo presente
También recuerdo el día en que te vi, en que nos vimos y hoy gracias a eso somos uno solo, juntos vamos avanzando juntando nuevos recuerdos que mañana nos harán recordar la dicha de tenerlos y compartirlos para revivir y disfrutar de esos recuerdos
… Nos leemos más adelante
