El acuerdo para la federalización de los servicios médicos estatales que fue signado por el Gobierno de Baja California Sur encabezado por Víctor Castro Cosío, tiene el objetivo de fortalecer las plantillas de personal y la disponibilidad de insumos que son requeridos para atender a las personas de más bajos recursos, expresó la directora de Servicios de Salud, Ana Luisa Guluarte Castro al sostener encuentros con trabajadoras y trabajadores de la Jurisdicción Sanitaria 02 Mulegé y de la Jurisdicción Sanitaria 1 Comondú-Loreto.
Durante las reuniones desarrolladas el jueves y viernes de la semana recién concluida en las instalaciones de ambas jurisdicciones sanitarias, Guluarte Castro sostuvo que la administración estatal tomó la decisión de sumarse a este proceso que prevé la implementación del programa IMSS- Bienestar en unidades médicas estatales a fin de fortalecer las plantillas laborales, la disponibilidad de insumos y medicamentos, así como la rehabilitación y mantenimiento de las instalaciones donde son tratadas las personas que no tienen seguridad social.
Acompañada por los jefes jurisdiccionales, Nicolás Miranda Vega y Marcelino Monreal Tamayo, la servidora pública explicó que la instalación de las mesas IMSS- Bienestar se llevó a cabo en todos los hospitales que son operados por la Secretaría de Salud de la entidad, donde se efectuaron evaluaciones para identificar necesidades de personal, equipamiento, material e infraestructura y deficiencias en procedimientos, para determinar prioridades e impulsar acciones que permitan mejorar la atención de los usuarios.
Este procedimiento comenzará ahora con las jurisdicciones sanitarias que tienen a su cargo los centros de salud, que son unidades de nivel básico para dar seguimiento y tratamiento a sudcalifornianas y sudcalifornianos que no cuentan con cobertura de IMSS regular, ni de ISSSTE. En este sentido la médica dijo que el programa IMSS Bienestar plantea un mayor acercamiento de los servicios con la comunidad, para fomentar la cultura del autocuidado que permite evitar la incidencia de enfermedades crónico-degenerativas.
Es una transición que pretende reducir brechas en la atención de personas sin derechohabiencia y que plantea articular con mayor eficiencia los tres niveles de atención médica para evitar gastos al bolsillo por motivos de salud, comentó Guluarte Castro al puntualizar que el proceso se efectúa con absoluto respeto a los derechos de las y los trabajadores de la Secretaría de Salud.